Los hidratos de carbono, necesarios – 1
Los desdeñados hidratos
En los países más desarrollados se ha venido observando un consumo creciente de proteínas, junto con una marcada tendencia a abandonar los hidratos de carbono.
El pan se viste de lujo
La disminución del consumo de pan ha obligado a los industriales panaderos a aguzar el ingenio: pan blanco, integral, con sésamo, italiano, francés… Un producto de siempre que se renueva para reconquistar mercados.
¿Qué ocurre con los hidratos de carbono?
Ya hemos dicho que los alimentos ricos en hidratos de carbono son energéticos, es decir nos proporcionan fácilmente gran parte de las calorías que precisamos (lo mismo que ocurre con las grasas). Sin embargo, su consumo ha disminuido al crecer el de las proteínas y grasa de origen animal. Los expertos de alimentación han dado la voz de alarma: nos estamos equivocando. Debemos recuperar el equilibrio y regresar a los platos tradicionales que incluían legumbres y cereales, desterrados en parte por el miedo a engordar.
Los alimentos ricos en hidratos de carbono
En primer lugar encontramos los azúcares. El único valor nutritivo del azúcar es el calórico; cada gramo que quemamos liberan en nuestro organismo cuatro calorías vacías, es decir que no aportan ningún nutriente. Actualmente se aconseja reducir el consumo de azúcar. Pero no basta con sustituir por sacarina el azúcar del café o la leche: hay que tener en cuenta su presencia en infinidad de preparaciones, desde mermeladas y compotas a repostería, refrescos y licores. La miel, muy prestigiada en los últimos tiempos, aporta, además de energía, algo de hierro y calcio y una pequeña cantidad de vitaminas C, B1, B2 y niacina.
A un panal de rica miel…
La miel ha entrado en la lista de alimentos míticos. Se le atribuyen propiedades casi milagrosas. Cien gramos de miel aportan 300 calorías a nuestra dieta. Se asimila bien y es ligeramente laxante.
Esa dulce tentación
Encontramos el azúcar en distintas presentaciones: blanca, morena, de cortadillo, cande… En fin, ¡que no te amarguen la vida!
Un alimento muy popular
La pasta de sopa o pasta italiana suele elaborarse con harina de trigo duro. Los espaguetis y los macarrones tienen mucha aceptación, sobre todo entre la gente joven.
Los cereales: nuestro pan de cada día
No nos referimos sólo al habitual pan de trigo: el maíz, la avena, el centeno, el arroz y la cebada forman parte también de este grupo. Es fácil darse cuenta, por su simple enumeración, de la importancia que tienen los cereales en la alimentación de la humanidad. El trigo está muy extendido en los países del mundo occidental, y el arroz es un alimento básico entre los orientales y de gran consumo en muchas regiones del mundo.
El avance de ciertas dietas clásicas parece imparable. Con ellas se ponen otra vez de moda alimentos que parecían desprestigiados.
Conquistadoras de conquistadores
El consumo de las papas o patatas ha arraigado con fuerza en numerosos países, por tratarse de un tubérculo de grandes posibilidades culinarias.
¿Legumbres y patatas?
Si no tienes contradicciones precisas o sobrepeso, incorpóralas, a tu dieta. Plato fuerte o complemento de otros, se trata de una energía barata y de fácil acceso.
Universalidad y arqueología
Las leguminosas o semillas comestibles están extendidas por toda la tierra. Su consumo se remonta a muchos miles de años atrás. Se encontraron frijoles de más de cuatro mil años de antigüedad en las cuevas del Ocampo (México); en tumbas egipcias se hallaron arvejas o guisantes; en la biblia aparece un plato de lentejas que se ha hecho famoso… Por su composición, las leguminosas son muy recomendables; en ellas encontramos proteínas vegetales, aunque el valor de estás es menor que el de las proteínas de origen animal; nos proporcionan también buena cantidad de hierro, tiamina y niacina. En cocina se presentan a muchas preparaciones; para niños o personas de estómago delicado pueden ser más fáciles de asimilar en forma de puré.
Una legumbre recia
Los garbanzos o chícharos provienen del área mediterránea, donde algunos platos típicos ven reforzada su energía con su presencia.
Porotos, judías, frijoles, habichuelas, alubias…
Esta legumbre, en sus diferentes variedades, se consume en muchos países, de ahí sus diversos nombres, y se prepara de mil formas distintas.
Las prehistóricas lentejas
Al parecer, las lentejas se conocían ya en la prehistoria. En la Biblia, Esaú vende por un plato de lentejas su primogenitura… Sin llegar a estos extremos, no te prives de comerlas en vez en cuando: aportan una buena cantidad de hierro y pueden prepararse también de mil maneras.
De un mundo a otro
La papa o patata, conocida de antiguo en el continente americano, en el siglo XVI conquistó Europa de forma tan completa y definitiva que se ha convertido en un alimento básico en varios países; en Alemania, por ejemplo, sustituye en muchas ocasiones al pan. Rica en hidratos de carbono, proporcionan unas 85 kcal por cada 100 gramos, además de 20 miligramos de vitamina C. Cocida resulta muy digestible, pero lo cierto es que se presta a tantas preparaciones que para las amas de casa resulta un producto prácticamente imprescindible.